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V
iajes
E
n Quebec todo lo que ves resulta
bastante extraño: estás en Norte
América, pero todo el mundo ha-
bla francés, las casas son de piedra gris
al estilo centroeuropeo y esta rodeada por
una muralla de 4,6 kilómetros. La ciudad es
preciosa. Con edificios de los siglos XVII,
XVIII Y XIX, muy bien conservados, el Viejo
Quebec es Patrimonio de la Humanidad.
Se divide en la amurallada Ciudad Alta,
donde se encuentra el edificio más famo-
so, el Chateau Frontenac, con unas vistas
increíbles sobre el río San Lorenzo y con
varios museos muy interesantes; y la Ciu-
dad Alta, unida por un funicular a la Ciudad
Baja, con su encantador Barrio Petit Cham-
plain lleno de calles adoquinadas, repletas
de tiendas y restaurantes y el Museo de
la Civilización, con representaciones de la
historia de Quebec.
La basílica de Nuestra Señora de Que-
bec es la Catedral católica más importante
de la ciudad. La Ciudadela es uno de los
monumentos más característicos de la
ciudad, sus vistas al río San Lorenzo son
espectaculares y podemos presenciar el
cambio de la guardia durante todos los días
del verano.
Otro de los sitios que me gustaron fue el
enorme Mercado del Puerto Viejo, donde
se venden productos frescos y flores y un
maravilloso sirope de amapolas, en prima-
vera. Debemos cruzar en ferry al otro lado
del río San Lorenzo, para ver la ciudad des-
de la otra orilla.
Una visita espectacular es a las casca-
das de la desembocadura del río Montmo-
rency sobre el río San Lorenzo: tienen 83
metros de altura, 30 metros más altas que
las del Niágara. Durante el invierno el vapor
de agua se solidifica, formando una gran
masa de hielo.
La provincia de Quebec es enorme, unas
tres veces el tamaño de Francia o cuarenta
el de Suiza y tiene una naturaleza salvaje,
con más de un millón de lagos y miles de
ríos y bosques.
En la desembocadura del grandioso río
San Lorenzo, que tiene el estuario más
grande del mundo, podemos ver en su
orilla norte a lo largo de 900 kilómetros la
llamada área de juegos de las ballenas y
también muchísimas focas.
El clima en invierno es muy duro, con tem-
peraturas muy bajas. La mejor época para
viajar a Quebec es de mayo a septiembre.
ENCANTADORA CIUDAD DE CANADÁ SITUADA EN
EL ESTUARIO MÁS GRANDE DEL MUNDO, EL DEL
RÍO SAN LORENZO
NATURALEZA SALVAJE Y
ATMÓSFERA ROMÁNTICA
QUEBEC
“La ciudad está llena de
leyendas, fantasmas,
pasadizos y túneles
subterráneos, que nos harán
temblar de miedo”
Parque Nacional de Gaspe.
Quebec de noche.
Alrededores de Quebec.
Viejo Quebec.