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C
ultura
ME GUSTARÍA…
Me gustaría…
Déjame pensar…
Me gustaría encerrar
todos los recuerdos del mundo
De mi mundo
En una bola de cristal
De cristal transparente para verlos
Sentirlos latir atemorizados
Insomnes y lacerantes
los menos buenos
Bulliciosos y felices
los agradables
Arrinconados y mudos
los olvidados
Y después…
Dejar rodar la bola de cristal
Entre nuevos sueños
Flotando en el viento de lo desconocido
Camino, solitario sendero,
rumbo al infinito.
Yo esperaré paciente
el nuevo resplandor.
Alfonso Pacheco
Miembro de la Asociación de Poetas y
Escritores del Real Casino de Murcia.
El Rincón
Literario
L
a Edad Media cristiana se da cita
en la plaza de San Andrés. Allí reci-
be culto, en Capilla privativa, Nues-
tra Señora de la Arrixaca, patrona de la
ciudad hasta 1731. La talla es una imagen
leonesa del XII. Sedente, con el Niño en
el regazo. Tardorrománica o pregótica.
Los reconquistadores la entronizaron
como protectora de sus vidas y hacien-
das. No es posible saber si ya se halla-
ba en la
Capilla de
la Arrixa-
ca cuando
los caste-
llanos del
Infante Al-
fonso tomaron posesión de la Alcazaba,
en 1243. O la trajeron ellos. En todo caso,
debió pertenecer a un Caballero, pues es
imagen de arzón, de las que se llevaban
a la grupa, por parte de los devotos de
Nuestra Señora. El caso es que es im-
pensable que el caballero propietario de
la imagen la cediera, pues eran muy celo-
sos de ellas. Hay que pensar que murió,
acaso en batalla, y legó la imagen para
el culto.
Dónde estuviera la original
Capilla de la Arrixaca, es difí-
cil saberlo. Muchos dicen que
es la Ermita de Santiago, en
Los Pasos de Santiago, entre
la trasera de El Corte Inglés y
el Jardín de la Pólvora. Otros,
que es la actual Capilla de la
Arrixaca, inserta en San An-
drés. Quedémonos con esta úl-
tima. La amplia plaza que hoy
tiene más personalidad como
la que alberga los Salzillos que
por la presencia de tan venera-
ble y antigua imagen, más de
dos siglos olvidada, hasta que
la rescatara Don Javier Fuen-
tes y Ponte. Literariamente, la
cosa no tiene discusión; esta
plaza es la de la Arrixaca.
Para Alfonso X, esta Imagen
hizo un milagro tan sólo para
que la vieran sus regios ojos:
logró permanecer en su capilla
a pesar de que dos reyes mu-
sulmanes, Ibn Hud (o acaso Ibn Mardenix
y los almohades), y dos cristianos, Jaime
I y el propio Alfonso X, consintieron en
“desahuciarla”. Al final, son los mismos
mursíes los que desisten de desalojar a
María, porque a quien lo hace “mucho
mal lo acorre”, según nuestro Alfonso X,
que escribió la correspondiente Cantiga
para versificar el suceso. Es la 169 del
Códice de El Escorial. Nunca lograron
sacarla de
la Capilla,
aunque se
dio la or-
den tres o
cuatro ve-
ces. Ésta
es de las Cantigas atestiguadas por el
propio rey. No se lo han contado, no lo ha
visto escrito: lo ha percibido él. Ése es el
argumento de la Cantiga. La Virgen per-
maneció, como esta imagen o como otra
anterior, en su capilla, para rezos de co-
merciantes cristianos primero, para mes-
nada castellana después. Ni cuatro reyes
logran desplazarla. Ese es el milagro de
la Arrixaca. Su lugar: la Plaza de San An-
drés, en Murcia.
Arrixaca y Milagro
en San Andrés
ENCLAVES LITERARIOS DE MURCIA
Por Santiago Delgado
Dos reyes musulmanes, Ibn Hud (o
acaso Ibn Mardenix y los almohades),
y dos cristianos, Jaime I y el propio
Alfonso X consintieron en “desahuciarla”